El Turismo Consciente es una práctica turística basada en la manera de viajar, conocer lugares, culturas y personas de una manera sostenible y respetuosa con el medioambiente.
Se trata de toda una experiencia vital que genera por un lado bienestar físico y emocional, ya que las personas que lo practican lo que buscan es un viaje interior y que esas vivencias los transformen positivamente, y por otro participar activamente en la reducción del impacto medioambiental llevando a cabo buenas prácticas y visitando establecimientos que compartan esos mismos valores.
La oferta turística consciente respeta, protege y potencia los recursos y valores naturales del destino, una ventaja competitiva que hace del lugar un sitio único, inigualable y exclusivo que permite ofrecer una mejor calidad y lujo en conceptos de sostenibilidad, medioambiente y naturaleza.
¿Cuales son los beneficios de practicar el turismo consciente?
Además de ofrecer a los propios turistas experiencias satisfactorias y de conexión consigo mismos y la propia naturaleza, practicar este tipo de turismo genera:
1) Reducción del impacto ambiental, menor consumo de energías y emisiones de CO2.
2) Respeto a la sociedad y cultura de los destinos turísticos locales, respaldando la conservación de elementos arquitectónicos y la propia tradición.
3) Integración de las comunidades locales e impulso del empleo a través de las pequeñas actividades turísticas.
4) Mayor conservación y aumento del desarrollo local que contribuye a la reducción de la pobreza por la reactivación económica que la práctica del turismo genera.
5) Supone una experiencia vital que enriquece, y fomenta prácticas sostenibles en su propio entorno.
6) Desarrollo equilibrado con el medio ambiente donde se crea conciencia sobre las necesidades y problemas de nuestro entorno.
7) El consumo de productos autóctonos y naturales de las zonas en que se realiza mejora la calidad de vida de la población local, tanto económica como socio-culturalmente.
La planificación previa de un viaje es fundamental para dejar la menor huella posible en el lugar de destino. Hay que informarse sobre las opciones y alternativas eco y sostenibles que nos ofrece el lugar, elegido tanto a la hora de desplazarnos como la de alojarnos, comer…
Intenta elegir un destino alejado de las tradicionales rutas turísticas y su masificación, descubre parajes naturales que tienes cerca y desconoces para vivir una auténtica aventura sin perder de vista las necesidades del planeta y sus habitantes.
Y tú, ¿te identificas con el turismo consciente?.